La nueva 'chincheta' -como quien atesora países marcados con esa tachuela en un mapamundi- en el mapa de la Comunitat Valenciana la puso oficialmente Unión Municipalista a finales de la pasada semana, cuando anunció la constitución de su nueva filial en Alboraya. Ya tiene una localidad más en su estrategia expansiva. Para liderarla ha fichado a referentes locales como el presidente de la Junta Local de Semana Santa –y exconcejal-, el presidente de la cofradía de la Vera Creu, la gerente de una residencia canina o una reconocida atleta. Personas conocidas en su ámbito, que es lo que buscan los partidos con aspiraciones de lograr concejal.
Alboraya precisamente constituye una población que representa la antítesis del bipartidismo. En ella proliferan históricamente las formaciones municipales de todo color y nomenclatura. Como hecho ejemplificativo, en la actualidad cuenta con acta de edil Alboraya Actúa, que concurrió por primera vez en 2023.
Además del simbolismo de esta localidad de l'Horta Nord, el llevar a cabo el anuncio de un grupo en Alboraya que generará candidatura a los comicios del último domingo de mayo de 2027 representa adentrarse de lleno en el cogollo del área metropolitana de Valencia.
Hasta la fecha Unión Municipalista, la coalición de partidos locales, ha ido creciendo en las comarcas con menos población o en términos más alejados de grandes capitales. En la provincia de Valencia Ens Uneix por el sur y el Partido de Requena y Aldeas por el noroeste suponen dos nítidos ejemplos.
En las últimas semanas, a menos de dos años ya de las próximas elecciones locales, el cerco sobre el área metropolitana de Valencia empieza a estrecharse. La plataforma que dirige el alcalde de Nules, David García, sabe que garantizar su presencia, o su expansión, en la Diputación pasa por obtener buenos resultados en el partido judicial que aglutina la capital y l'Horta en toda su extensión. En esta demarcación se reparten 18 escaños provinciales del total de 31 en liza.
Alboraya supera los 20.000 habitantes. Supone una buena base desde la que lanzar su marca genérica y municipalista. No obstante, solamente representa un inicio. Por ese motivo en este tórrido verano han agilizado las reuniones con más grupos de ciudadanos de diversas poblaciones que podrían hilvanar las respectivas filiales de Unión Municipalista.
Esta semana, sin ir más lejos, lo harán en dos poblaciones devastadas por la dana –una variable muy a tener en cuenta en la intención de voto- como Paiporta y Picanya. Recientemente ya celebraron encuentros iniciáticos en Catarroja, Sedaví o Benetússer, que se hallan en una situación similar. Rocafort o Quart de les Valls (esta última, ya en la comarca de Camp de Morvedre) forman parte de esa ronda de reuniones de las últimas semanas.
Y otros dos municipios que, por su peso poblacional, influirán de manera determinante en el reparto de escaños en la Diputación: Xirivella y, principalmente, Torrent.
Las fiestas locales, punto habitual de encuentros tradicionales y de presentaciones entre desconocidos, propician un escenario adecuado para captar, fichar o incorporar personas para nuevos proyectos. Agosto concentra la mayor parte de ellas. Y a partir de septiembre ya comenzará el acelerón preelectoral, el curso previo al electoral. Cuando ya empieza a respirarse el aroma a contienda y sube la adrenalina, la ilusión y la ambición de quienes desean competir en ella.