Un pequeño comercio. EPDA
La
Confederación Española de Comercio (CEC) ha pedido al Gobierno que,
en el marco de la Conferencia
Mundial sobre Cambio Climático,
que tiene lugar entre los días 2
y 13 de diciembre en Madrid,
lidere la propuesta de creación del Día Mundial del Pequeño
Comercio. Una iniciativa puesta en marcha por Confecomerç CV,
organización asociada a la CEC, y en la que se está llevando a cabo
una recogida de firmas a través de Change.org.
Son
muchos los motivos que justifican la creación del Día Mundial del
Pequeño Comercio, no solo a escala nacional sino también
internacional, pero, en particular, destacan los relacionados con la
protección del clima:
El pequeño comercio,
contribuye, mediante el consumo de proximidad, a disminuir
la huella de carbono.
Su cercanía permite que el consumidor pueda ir a pie, reduciendo
así las emisiones provenientes de distintos medios de transporte y
disminuyendo de manera decisiva nuestra huella sobre el medio
ambiente.
El pequeño comercio
impulsa
la economía “kilómetro cero”,
ya que fomenta la actividad emprendedora de pequeños empresarios y
autónomos y genera miles de empleos, contribuyendo de esta forma a
la riqueza y la recuperación local; además, pone a disposición de
los ciudadanos principalmente productos de productores locales.
El pequeño comercio
fomenta el consumo
responsable,
favoreciendo la sustitución de la ecuación “comprar y tirar”
por la de “rellenar y reparar”.
Ayuda a luchar contra
la desertización rural,
ya que la supervivencia de muchas pequeñas áreas poblacionales
depende en gran medida del mantenimiento de los comercios
establecidos en las mismas, que acercan a sus habitantes productos y
servicios de primera necesidad.
Aparte
de estos argumentos, en la página web de la iniciativa
www.essuturno.com se ha
incluido las razones y el vídeo que pone de relieve el por qué se
debería proclamar el Día Mundial del Pequeño comercio, siendo
además el comercio minorista un
sector estratégico
de la economía, que crea empleo de calidad y que vertebra la vida de
las ciudades y los pueblos.
En
nuestra opinión, la creación del Día Mundial del Pequeño Comercio
contribuiría a la concienciación
de Gobiernos, Administraciones Públicas, organismos, empresas y
consumidores sobre la importancia
estratégica que las pymes del sector
tienen sobre el
clima, la economía y,
en definitiva, sobre la calidad de
vida de los ciudadanos, al tiempo
que favorecería la llegada de ayudas necesarias para el sector y que
se le otorgue el reconocimiento que merece a nivel social, político
y económico.
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