Los bomberos forestales advierten de que el verano será muy complicado en lo que a incendios se refiere. /EPDA A pesar de que el incendio de Tárbena aún no ha sido dado por completo como extinto, los vecinos desalojados por este fuego han podido por fin dormir en sus casas. De esta forma se acaba la angustia para 190 vecinos que llevaban desde el domingo fuera de sus casas sin saber cómo evolucionan sus propiedades.
Pero mientras que las cosas se relajan en el frente del incendio, en la retaguardia del mismo la temperatura no para de subir después de que ayer los bomberos forestales pusieran sobre la mesa la posibilidad de una huelga indefinida.
La medida se presentó ayer durante una manifestación de los representantes de este cuerpo de bomberos, y la cuestión de fondo son las condiciones laborales de un servicio que aún se considera “de temporada” y no dispone de efectivos los 365 días del año.
De hecho ese es el primer punto de las reivindicaciones de los bomberos forestales, una estabilización de los puestos de trabajo en la que se garantice que habrá servicio los 365 días del año. Pero sus aspiraciones van más allá de esto, ya que también piden una ampliación de la plantilla que permita establecer un servicio de 24 horas, ya que tal y como está organizado ahora mismo el cuerpo sólo existen dos turnos de trabajo en la lucha contra el fuego. Además solicitan que el cuerpo pase a contar con un convenio laboral, en el que sería el primer acuerdo de este nivel para los bomberos forestales valencianos.
Los bomberos consideran que sus reivindicaciones son esenciales para prepararse para lo que viene, ya que, según advierten, las altas temperaturas de abril aventuran “un verano muy complicado” en lo que a incendios se refiere.
A pesar de ello, los protestantes están dispuestos a realizar paro ante lo que consideran una falta total de interés de la administración por sus problemas, ya que última reunión con la Generalitat fue el 15 de febrero. Un aspecto que desde la Generalitat se niega completamente responsabilizando de la situación a la gestión del Botànic. “Estamos trabajando para solucionar las reivindicaciones de los bomberos forestales, pero en ocho meses no se arreglan los problemas de ocho años” ha afirmado la consellera de Interior Elisa Núñez.
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