Portavoz del Partido Popular, Vicente Mompó. EPDA El Grupo Popular en la Diputación de Valencia ha recogido durante el mes de julio y lo que llevamos de agosto las numerosas quejas y el «sentimiento de agravio» de los alcaldes del partido en la provincia porque llevan meses haciendo frente solos a la gestión de la crisis sanitaria, social y ahora económica.
El portavoz popular en la corporación provincial, Vicente Mompó, ha recordado que «es función del presidente de la diputación, Toni Gaspar, mediar como interlocutor con la consellera de Sanidad, Ana Barceló, para poner las cartas sobre la mesa y mostrarle la indignación que existe entre los dirigentes locales».
«Los alcaldes nos hemos visto impotentes, sin información oficial, sin datos para poder prevenir las actuaciones y ahora encima cediendo recursos, como la policía local a la consellería, para hacer de “rastreadores”», ha explicado Mompó.
El portavoz del Grupo Popular ha insistido en que «Gaspar tiene que dar la cara ante sus compañeros de partido y exponerles que no están haciendo las cosas bien, que se han equivocado en muchas decisiones, y desde los ayuntamientos no se puede volver a sufrir el mismo trato ante una posible segunda ola de contagios».
La realidad es que desde las filas populares, así como desde las propias disidencias socialistas, se han venido constantemente mostrando quejas ante la falta de información y transparencia en la gestión del COVID-19. El malestar estalló cuando, después de casi dos meses solicitando datos oficiales del número de contagios por municipios y obteniendo la negativa por respuesta amparándose en la Ley de Protección de Datos, finalmente se ofrecen los datos desde la propia Generalitat.
«Desde los Ayuntamientos teníamos la sensación de que nos estaban echando a los leones, teniendo que dar explicaciones de decisiones que no entendíamos a los vecinos y sin ningún tipo de datos oficiales, acogiéndose a la LOPD, cuando en otras Comunidades Autónomas se estaban dando esas cifras sin ningún problema» ha indicado Mompó, quien ha recordado que «al final cuando dieron los datos tal cual se los pedíamos no han hecho sino demostrar que nos habían estado engañando y, lo que es peor, engañando a toda la ciudadanía».
No es este el primer varapalo que sufren los ayuntamientos. A la polémica surgida por la falta de información suman ahora el descontento general ante la decisión del Gobierno de «echar mano» de los ahorros de las administraciones locales.
Este «atropello» del Ejecutivo de Sánchez levantando ampollas en filas de todos los colores e ideologías y ante el que los populares siempre se han mostrado en contra.
Por ello, Mompó ha explicado que «ha llegado el momento de que el presidente de la Diputación de Valencia, como máximo representante del Ajuntament de ajuntaments, demuestre una mayor implicación, se siente delante de la consellera de Sanidad, Ana Barceló, y le plantee muy claramente las necesidades de los ayuntamientos como administración más próxima a las personas».
Cuestiones como la falta de atención personal en los centros de salud, la falta de pruebas y test o la falta de coordinación entre las diferentes administraciones, «no pueden seguir formando parte del día a día de las alcaldías», ha finalizado el portavoz popular.
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