Los sindicatos CCOO y UGT, FAMPA y Escola
Valenciana han alertado de que la comunidad educativa "ya no soporta más
promesas incumplidas" sobre la derogación de la Lomce, que tachan de
"injusta" y "clasista", y reclaman una nueva ley que proteja la
educación pública y acabe con los recortes educativos.
Miembros de los sindicatos y de las entidades representantes de los
padres y madres de alumnos se han concentrado este viernes frente a las
puertas de la Conselleria de Educación para exigir una mejora del
sistema de enseñanza pública con motivo del inicio de curso.
A la protesta se han sumado también la Confederació Gonzalo Anaya,
CAVECOVA, València Laica y el sindicato de estudiantes FEU, y se ha
leído un comunicado conjunto en el que todas las entidades han reclamado
al Gobierno central que "revierta" los recortes y abra un canal de
diálogo hacia una nueva política educativa centrada en el diálogo y la
participación.
Asimismo, han instado a la Generalitat a hacer una apuesta "más
valiente" por la enseñanza pública y de calidad, e "igualdad de
representación" de profesores y padres de alumnos en las propuestas
educativas de los centros, como consejos escolares y nuevas
construcciones.
"Ha habido avances para la reversión de las políticas que se estaban
realizando, pero todavía queda mucho por hacer a nivel estatal y de la
Comunitat", según la secretaria general de FAMPA València, Esther
Concepción, como portavoz de los convocantes.
Concepción ha insistido en que hay que "acabar con la Lomce para hacer
un nuevo paradigma educativo", y seguir reclamando más financiación para
la Comunitat porque "sin recursos no podemos hacer reformas".
En el ámbito autonómico, los sindicatos y los representantes de padres
de alumnos piden asimismo más acciones que mejoren las condiciones de la
escuela pública, del alumnado, las familias y el profesorado.
En relación con la implantación de la jornada continua en muchos
centros, reivindican que la Conselleria de Educación elabore "estudios
serios" que determinen el modelo más adecuado para los alumnos, y que no
se deje la elección en manos de los centros.
En materia de infraestructuras, Concepción ha señalado que el curso
escolar se iniciará con alumnado aún en barracones, y ha lamentado que
el plan Edificant está siendo demasiado lento, en parte por problemas
burocráticos.
Del mismo modo, reclaman la reducción de ratios en las aulas, que
permitan una atención más individualizada de los alumnos y mejore los
programas de inclusión, y profesionales especializados como educadores
sociales y de educación especial para su atención.
Sobre el profesorado, piden la estabilidad en las plantillas, sobre todo
en el sur de la provincia de Alicante, y que se avance en la reducción
del horario lectivo del profesorado, al tiempo que lamentan el retraso
en la cobertura de las sustituciones y la pérdida de puestos de trabajo
en los centros docentes.
Demandan, por último, la consolidación y ampliación de la red de
enseñanza pública plurilingüe en todas las edades y territorios con la
garantía de acceso a la enseñanza en valenciano, que "asegure los
derechos lingüísticos" y que la religión no sea impartida en la escuela.
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